+ Te adoramos, ¡Oh Cristo! y te bendecimos.
+ Porque por tu santa cruz redimiste al mundo.
Jn 19 23-24
Después que los soldados crucificaron a Jesús, tomaron sus vestiduras y las dividieron en cuatro partes, una para cada uno. Tomaron también la túnica, y como no tenía costura, porque estaba hecha de una sola pieza de arriba abajo, se dijeron entre sí: “No la rompamos. Vamos a sortearla, para ver a quién le toca”. Así se cumplió la Escritura que dice: “Se repartieron mis vestiduras y sortearon mi túnica.” Esto fue lo que hicieron los soldados.